Quería preparar una entrada hablando de las personas que, siendo de la misma ideología no están de acuerdo en cosas que en principio si deberían. O en cómo cada individuo tiene una noción del tiempo de distintas formas. Pero no lo voy a hacer. Voy a hacer una entrada sobre las tradiciones.
Estos días, estamos viendo y viviendo una de las más arraigadas en nuestro país: la Semana Santa. ¿Creencia o tradición? Ayer, a pesar de la amenaza de lluvia, fueron miles las personas que acudieron a ver nuestra procesión, la que hace la Cofradía Padre Jesús de Nazareno y Nuestra Señora de los Dolores. ¿Porque? Algunas por creencia, personas que hacen promesas y son devotas. Otras por cultura. Es la cultura de nuestro país. Otras por admiración. El esfuerzo de esos costaleros y esas costaleras, a quien su fe les hace tener fuerzas para estar, durante cinco horas, llevando los pasos, haciéndolos bailar, haciendo reverencias. No es fácil coordinar a esas personas, por lo que también tienen los capataces. Ellos les indican si van bien, si van de lado, en qué momento hay que hacer la “levantá”. Les acompañan las bandas, la de la misma Cofradía y, este año la de la Banda de corneta y tambores de Cabrera d’Anoia. La primera acompañando al Cristo y la segunda a la Virgen. El domingo de Ramos fue la Borriquita la que salió por las calles de Badia. Esta está portada por niños y niñas de la Cofradía. Todo para conseguir que quienes acudimos por devoción, por cultura o por admiración, nos vayamos orgullosos y orgullosas de nuestra Cofradía.
Gracias.
Estos días, estamos viendo y viviendo una de las más arraigadas en nuestro país: la Semana Santa. ¿Creencia o tradición? Ayer, a pesar de la amenaza de lluvia, fueron miles las personas que acudieron a ver nuestra procesión, la que hace la Cofradía Padre Jesús de Nazareno y Nuestra Señora de los Dolores. ¿Porque? Algunas por creencia, personas que hacen promesas y son devotas. Otras por cultura. Es la cultura de nuestro país. Otras por admiración. El esfuerzo de esos costaleros y esas costaleras, a quien su fe les hace tener fuerzas para estar, durante cinco horas, llevando los pasos, haciéndolos bailar, haciendo reverencias. No es fácil coordinar a esas personas, por lo que también tienen los capataces. Ellos les indican si van bien, si van de lado, en qué momento hay que hacer la “levantá”. Les acompañan las bandas, la de la misma Cofradía y, este año la de la Banda de corneta y tambores de Cabrera d’Anoia. La primera acompañando al Cristo y la segunda a la Virgen. El domingo de Ramos fue la Borriquita la que salió por las calles de Badia. Esta está portada por niños y niñas de la Cofradía. Todo para conseguir que quienes acudimos por devoción, por cultura o por admiración, nos vayamos orgullosos y orgullosas de nuestra Cofradía.
Gracias.
